Cómo elegir un SSD para tu ordenador portátil

Para mejorar el rendimiento de un Pc no se requiere de una gran inversión económica, con tan solo cambiar su disco HDD por uno SSD puedes hacer la diferencia. Las ventajas son amplias, consigues que tu portátil arranque más rápido y que todo tenga una mayor fluidez.

La mejor forma de darle una nueva vida a tu computadora portátil es reemplazando ese viejo HDD por un SSD, durante este proceso surgen interrogantes como: ¿Mi portátil es compatible con un SSD? ¿Qué tipo de SSD es mejor para un portátil? en este articulo resolverás las dudas y te enseñaremos a elegir el mejor SSD para tu ordenador.

Los SSD son más costosos que los HDD pero con los constantes avances tecnológicos las diferencias nos son tan desproporcionadas y ya es posible encontrarlos en valores que pueden ser asequibles para casi todo bolsillo.

 SSD de 500G ➽ Ver Oferta

Para conocer qué capacidad de almacenamiento SSD necesitas, observa cuanto espacio ocupan tus archivos en tu actual HDD y, sobre todo, pregúntate si realmente necesitas todo el espacio que tienes ocupado o son archivos que perfectamente podrías tener guardados en un disco externo para acceder a ellos solo cuando los necesites.

Como norma general, la instalación de Windows 10 ocupa entre 25 GB y 30 GB, por lo que en un SSD de 250 Gb te quedarían unos 200 GB para tus archivos después de haber instalado todos tus programas y aplicaciones.

SSD 2.5 o SSD M.2

Tomada la decisión sobre la capacidad de almacenamiento del SSD, es hora de elegir su formato. Si tu portátil ya tiene unos años, es más que probable que su placa base solo soporte unidades SSD con conector SATA, que es exactamente el mismo que utilizan los discos HDD tradicionales. En cambio, si tu portátil es más reciente, es posible que además de tener un conector SATA, también sea compatible con el formato de SSD M.2.

SSD de 500G SATA M.2 ➽ Ver Oferta

Las unidades SSD con formato M.2 utilizan un conector muy parecido al PCIe de las placas base o las memorias RAM, pero considerablemente más pequeño. En uno de los extremos de la unidad SSD se encuentran los conectores, que se insertan en el conector M.2 de la placa base del portátil, y este se fija en paralelo a la misma con un pequeño tornillo que lo sujeta desde el extremo contrario al conector.

Si deseas conocer más sobre SSD 2.5 y SSD M.2 le recomendamos ver este video.

La información del video aclara muchas dudas salvo por este pequeño detalle físico en el conector, el aspecto de las unidades son idénticos, pero a nivel interno su funcionamiento es completamente diferente. Por ese motivo, antes de comprar una unidad SSD con formato M.2, debes averiguar si la placa base de tu portátil soporta el protocolo NVMe PCIe o M.2 SATA.

Artículo Anterior Artículo Siguiente